jueves, 24 de noviembre de 2011

Bienvenidos al sur

Claudio, directivo del servicio postal italiano, ansía ser trasladado a Milán para complacer a su neurótica mujer. Una maniobra heterodoxa para lograr tal meta es descubierta, de modo que no consigue el puesto y es castigado con un destino en un pueblo del Sur cercano a Nápoles, considerado lo peor de lo peor. Marchará solo, y descubre que aquello no está tan mal, pero mantiene la ficción de que sufre mucho allí, pues la compasión de su esposa ha hecho mejorar las cosas en el matrimonio.

Éste es uno de esos casos en que el remake encuentra fácilmente su justificación, pues la película francesa Bienvenidos al norte en que se basa jugaba mucho con la idiosincrasia y los acentos galos, por lo que parte de su gracia se la perdían los espectadores no-francófonos. La simpática comedia que nos ocupa es la versión italiana, con lo que una aportación indudable es la de adaptar la cosa al caso italiano, sacar su jugo a los rasgos y estereotipos locales.

Por lo demás, y aparte de la variante de la Camorra, que da pie a algún gag novedoso, se mantiene la estructura narrativa, con el doble caso de relaciones de pareja que deben ser resueltas. Por un lado la de Claudio, que debe afrontar sus problemas matrimoniales, y por otro el de su subalterno Mattia, con complejo de Edipo e incapaz de declararse a la chica que le gusta.

1 comentario:

Cristina dijo...

¡Enhorabuena Olga! Me ha gustado mucho el referente que has encontrado en una película de la actualidad en cuanto al mito de Edipo.